Equilibrios

Mendoza: Desarrollo Económico

Pirotecnia Política: “La inflación prolongada jamás estimula la economía. Al contrario, la distorsiona, la perturba y desorienta la producción y el empleo. El desempleo es causado simplemente por los niveles elevados de los salarios en algunas industrias, originados bien por las demandas extorsivas de los sindicatos, por leyes de salario mínimo (que mantienen a los adolescentes y a los trabajadores no calificados fuera del mercado laboral) o por un prolongado y excesivamente generoso seguro de desempleo.” (Henry Hazlitt)

Para el Ejecutivo CARLOS MENDOZA DAVIS y el Gobierno de Baja California Sur, está clara la visión que tienen e impulsan en beneficio del desarrollo de esta media península, que hasta antes del Huracán “Odile” en Septiembre de 2014, mantenía indicadores favorables de crecimiento económico, es decir se generaba inversión, empleo y desarrollo social, por encima de la media nacional, situación que le merecía reconocimientos y le ubicaba como ejemplo, en la mayor parte del país.

Lo que ocurrió en el último cuatrimestre de 2014 en BCS, cuando los indicadores marcaron no solo un estancamiento del coeficiente económico, sino también el descenso de las expectativas, lo que indujo a que el esfuerzo por darle estabilidad al Estado, se enfocara en lo social con un énfasis en la recuperación de la actividad productiva, en el rescate y rehabilitación de toda la infraestructura turística, que es el vital motor económico de la región, pero también en la regularización de todos los servicios básicos, que permiten la movilidad financiera del Estado.

Sin soslayar la incertidumbre que se generó, por el brutal fenómeno de la narcoviolencia en la entidad en torno a las inversiones, el esfuerzo realizado por los gobiernos, se dividió en dos prioridades, detener o controlar la criminalidad y generar expectativas elevadas de seguridad en todos los sentidos, situación que se dio además en el marco de una campaña política, que generaría la sucesión gubernamental en BCS y por otro lado, se buscaba estabilizar lo que es en esencia la base de la vida productiva de esta entidad turística, agrícola, ganadera, pesquera y de servicios.

En esa transición del estado de crisis a la “normalidad”, desde el inicio del presente Gobierno, se dedicaron a planear las estrategias, que ahora se están implementando en materia de desarrollo financiero, social y crecimiento, bajo el entendido de que el reto que se asumiría, no sería cualquier cosa, pero se tenía y se tiene la necesidad de revertir estos indicadores, sobre todo en el terreno de generación de empleos, para lo que se están dando ya, los primeros pasos, según lo explica en su política gubernamental, el propio CARLOS MENDOZA DAVIS.

Generar 3,400 empleos formales por parte del Gobierno de BCS, antes de los primeros 100 días de administración, no es cualquier cosa, es un asunto que no se ve, pero que sí es medible por los organismos que en su momento, registraron el estancamiento de la economía sudcaliforniana.

De acuerdo a las cifras que permiten la planeación en materia de empleo en Baja California Sur, se están generando espacios laborales, pero el indicador de desempleo no decrece, porque también hay que decir, que los espacios creados están siendo ocupados en la mayoría de los casos por gente de otras entidades federativas, situación que ya fue evaluada y obligará a los Gobiernos a tomar medidas importantes y establecer compromisos con las empresas radicadas en la entidad, para convencerlas de que si se generan empleos, que estos sean para la gente que vive aquí, que previamente estaría siendo capacitada con estándares de calidad, que les permita cumplir con la demanda de mano de obra calificada e integrar además, a los profesionistas egresados de las instituciones educativas locales.

De acuerdo a las expresiones del Ejecutivo Estatal, para mediados de su gobierno y si se cumple la meta de generar 8 mil 500 empleos por año –reto que inicia en este 2016- significará entonces, que se estaría abatiendo irrefutablemente la tasa de desempleo, que ahora luce excesiva.

Desempleo es generador de pobreza, el empleo genera estabilidad social, bonanza económica y desarrollo, de ese tamaño es la apuesta del Gobierno de Baja California Sur y la política pública anunciada, desde su asunción al poder en septiembre de este año y que se adelanta, será uno de los puntales del Plan Estatal de Desarrollo.