Cherán y el autogobierno
Las marchas y la revolución
El estado de Michoacán ubicado en la costa occidental de México, está formado políticamente por 113 municipios, de los cuales hay uno, Cherán, que desde hace cinco años decidió en asamblea general, eliminar los partidos políticos, las autoridades tradicionales y regirse bajo el sistema de autogobierno. Tradicionalmente se estila que para que una comunidad funcione debe contar con autoridades gubernamentales ya que de lo contrario privará el caos. En Cherán pasa lo contrario: desde que formaron el autogobierno eliminaron los partidos políticos, las elecciones y autoridades tradicionales, la paz reinó desde entonces y desterraron el narcotráfico, los crímenes y secuestros. Por ser comunidad indígena (purépecha) de 20 mil habitantes, se rigen por el sistema de usos y costumbres. En asamblea general –se forman en dos filas hombres y mujeres- votan las autoridades a “mano alzada” para dar forma a los Concejos Operativos encargados de las finanzas, la administración y la seguridad. Estos concejos están sujetos al Concejo Mayor y a los K´ericha que es el concejo de tres personas mayores, pero la máxima autoridad es la Asamblea General. Para el ejercicio político la comunidad está dividida en cuatro barrios o distritos representados en el Concejo Mayor por los tres adultos mayores.
En Cherán no caben partidos políticos, y obviamente no hay candidatos ni campañas políticas. No hay autoridades nombradas por autoridad tradicional sino que la comunidad nombra sus representantes. Los locales donde funcionaban las estructuras de los partidos ahora son bibliotecas. En esta comunidad se puede transitar con tranquilidad ya que hay una policía o ronda comunitaria. En cada barrio hay jueces menores, Cherán tiene sus representantes ante el gobierno estatal y federal así como en los órganos electorales. Pero a Cherán no entra ningún funcionario del gobierno mucho menos los partidos políticos. La participación decidida de toda la población permitió la unidad y el autogobierno, la eliminación del crimen organizado, la corrupción y la violencia. Antes de la trascendental decisión Cherán era presa del crimen organizado, la corrupción de alcaldes y partidos y la devastación de su riqueza forestal de encinos. Hoy, la tala de árboles se realiza organizadamente, se forestan miles de hectáreas y el beneficio del trabajo llega a toda la comunidad aunque el estado y la federación les entregan recursos.
Obviamente los puntos de acceso son vigilados por policía y población fuertemente armada. Hace unos días recibí por face book un video en el que la población reunida lanzaba consignas de organización y disparaban muchas metralletas… es una población fuertemente armada y decidida.
Cherán funciona como autogobierno con autoridades nombradas en asamblea general. No existen los políticos, ni alcaldes, ni regidores, ni el gobernador de Michoacán puede entrar, ni nada. Desde que instauraron el autogobierno se acabó la corrupción, el narcotráfico y la tala clandestina de árboles. Cuando se comete algún delito, con sencillez lo resuelven los jueces menores o ancianos. Los delitos mayores –casi no hay- se envían a los tribunales del estado.
Es un ejercicio político exitoso que funciona desde hace cinco años, aunque hay que decirlo, para lograrlo hubo fuertes enfrentamientos entre la población y los talamontes. Las mujeres iniciaron la organización.
El gasolinazo funciona desde el día primero de enero y en muchas regiones de la nación la población se ha manifestado generalmente en marchas. Los bloqueos han sido reducidos por la violencia del gobierno. El domingo las marchas involucraron a varias decenas de miles de ciudadanos. ¿Esta insurgencia popular podrá abrir el camino para que Peña Nieto dé marcha atrás en la medida que provocó el gasolinazo? No lo creo. Hace falta el movimiento popular que involucre a cientos de miles de marchistas y tomen palacio nacional, la cámara de diputados y de senadores y no los liberen hasta que el ejecutivo firme la derogación del acuerdo. ¿Se atrevería el gobierno a masacrar al pueblo concentrado en palacio y ambas cámaras? Esa es la gran incógnita. La toma pacífica no sería generar violencia; el estado sería el generador de la violencia… ¿pero se atrevería a echarle el ejército a cientos de miles?
Lo cierto es que necesitamos otro tipo de gobierno; este ya no funciona en ninguna parte del país. Valga el ejemplo de Cherán, Michoacán. Con marchas de inconformidad Peña y sus miles de corruptos en todos los estados, congreso de la unión y congresos locales, no moverán un dedo para la autodeterminación del pueblo. La inconformidad ya es nacional, falta organizarla. La tecnología hoy juega un gran papel, nuestro pueblo ya no es el mismo de los sesenta de la insurgencia estudiantil, no, hoy hay grandes sectores organizados: en las comunidades periféricas a las grandes ciudades, campesinos, ejidatarios agraviados por expropiaciones ilegales, robo de tierras y aguas, las etnias de Yucatán, Oaxaca, maestros, la CNTE, ciudades pequeñas y grandes como Mexicali, Guadalajara, Ciudad de México (que debería ser el motor), decenas de miles de marchistas que necesitan el guía que los lleve a paralizar la función pública. Hoy la inconformidad campea hasta en la iglesia y grandes empresarios, grandes sectores de la vida estudiantil e intelectual, las etnias de la nación (como Cherán), las redes sociales. En el mismo ejército priva la inconformidad… ¡Pero cuidado! El crimen organizado es el gobierno.
Somos muchos millones de mexicanos agraviados ferozmente desde siempre, pero más desde hace 30 años. Sabemos de los millones de compatriotas que padecen la pobreza y la miseria; sabemos de la pérdida de la dignidad nacional y del sentido de pertenencia. Sabemos que los buitres ya se tragaron la serpiente y el nopal, las piedras y el agua. Mi correo: [email protected]
PASEMOS EL RUBICÓN: ¿Qué necesitamos pues? La chispa revolucionaria, la chispa histórica que incendió la nación con el ejemplo libertario de Pancho Villa, Flores Magón, Morelos, Zapata, Lucio Cabañas y Genaro Vázquez. Ya no sería lo mismo al surgimiento del EZLN, sus batallas y su soledad… ¿Verdad Ché Guevara?
¿Dónde se prenderá la mecha de la chispa histórica? O las marchas se nos escurrirán entre las manos como se escurre el agua de las acequias de la revolución mexicana?
Y mientras escribo el presente artículo, en la tele me taladra la voz del gobernador hablando como si nada pasara… Tú no irías a la revolución gobernador… formarías en la fila de los enemigos del pueblo. Solamente los que viven de la complicidad y corrupción están con el gobierno, y son pocos comparados con el pueblo agraviado. Alea Jacta Est. 24-01-17- Miembro de ESAC