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Plebiscitos : Cambio de “pichada”

  • Cambio de “pichada”

Por lo que se ve a Pedro Osuna no le “salió” la jugada –el verdadero poder detrás del trono en Mulegé– con los plebiscitos. Inicialmente no quería que se llevarán a cabo y ni tarde ni perezoso giró instrucciones a la alcaldesa de Mulegé para que nombrara directamente a los nuevos delegados y sub Delegados municipales. Como el proceso plebiscitario no está a merced de caprichos ni de ocurrencias, sino consagrado en la actual ley orgánica municipal y el no realizarlos significaría una flagrante violación a ley, “filders’s pa’ tras”, con la novedad que en aras de rectificar el error cometen más errores; ¡nombran Delegados Municipales interinos!. Se desconoce el por qué los actuales Delegados Municipales que fueron electos para un periodo determinado mediante un proceso plebiscitario renunciaron o fueron removidos 45 días antes de la toma de protesta de los nuevos Delegados. Tampoco se conoce cuál es el verdadero propósito de nombrar Delegados interinos a menos de un mes de que se realice el proceso plebiscitario.

Y eso que en Mulegé hay dos alcaldes; uno que manda y otra que obedece, como en los tiempos de Juan Domingo Perón y Evita. La cuestión es que en Mulegé no es Argentina ni hay quien le llore a doña Cecilia López, ni Pedro Osuna es Juan Domingo Perón, sino una sucia y burda copia del peor nepotismo y autoritarismo que se haya asentado en ese municipio. Hace un par de días no pocos muleginos sostenían que lo peor que les podía pasar al municipio ya les había pasado con el “Guille” Santillán, sin embargo todo indica que lo peor está por venir.

Los mandos más visibles en la “nueva” administración están en manos de dos mujeres; la alcaldesa Cecilia López y la Secretaria General del Ayuntamiento, Edith Aguilar, y en medio de ambas, Pedro Osuna López, el verdadero poder detrás del trono. Frente a la curiosa e inesperada formación de un triunvirato en ese municipio, los muleginos dicen a guisa de burla y sorna, que más bien se trata de una nueva edición de “dos mujeres, un camino”.
Y algo hay de cierto o de medias verdades de lo que dicen los cachanías. Pedro Osuna López, actual director de la API en Santa Rosalía, ya fue alcalde de Mulegé, de ahí que conozca el perfil de cada uno de los actuales funcionarios y regidores que cobran en la misma nómina donde cobra Cecilia López y Edith Aguilar. En la época “dorada” de la administración que encabezó el ahora atracador de barcos proviene el “férreo” control que ejerce sobre la actual secretaria general, Edith Aguilar, quien hace un par de días tuvo que cumplir las instrucciones del director de la API en Santa Rosalía, de nombrar delegados y sub Delegados Municipales interinos a lo largo y ancho del extenso municipio de Mulegé.

De Pedro Osuna López aún hay mucho que escribir –y hablar– por su forma mustia de ejercer el poder. Se maneja a bajo perfil, rara vez contesta el teléfono y normalmente encabeza reuniones en lo oscurito para que la gente no se entere que él es quien manda. De las 8 de la mañana a la 1 de la tarde atiende la API. Después de la 1 de la tarde encabeza reuniones secretas con los principales funcionarios municipales para dictarle lo que se debe de hacer y por último le informa a su esposa la alcaldesa, Cecilia López, simplemente para que esté enterada de los movimientos e instrucciones y no “la riegue” cuando sale a luz pública o le hagan alguna pregunta. En su estilo mustio de operar y ejercer el poder, destaca que el mismo día que la alcaldesa tomó protesta la mandó a quitar los sellos de clausura que había ordenado el anterior alcalde ante la negativa de la minera de pagar impuestos, derechos y multas. La cuestión, el quid del asunto es que todo quedo igual que antes; la minera no ha pagado ni hay fecha para que cubra sus obligaciones fiscales. Ante el silencio que arropa a la nueva administración no pocos cachanías se preguntan ¿y cuándo y cuánto va a pagar la minera?. Todo quedo en secreto, de ahí que el sello característico de la casa sea el silencio, el sigilo, la opacidad.

Para Pedro Osuna y el triunvirato nepótico del que forma parte, cumplir y hacer cumplir la ley no es cosa que les espante el sueño. En la Dirección Municipal del Deporte dieron posesión a maestros de educación física que legalmente están impedidos por la ley de responsabilidades de los servidores públicos del estado y municipios de BCS: Antonio meza Trejo como titular de la Dirección del Deporte Municipal, a su esposa, Valentina Arellano Cortes, asesora del Director Municipal del Deporte y a su sobrino, Ricardo “güero veneno” Meza Olachea, como Sub Director Municipal del Deporte. ¿Y la ley apa’? se preguntan muchos cachanías a manera de sorna. La cuestión es que ni la ley ni el que dirán les preocupa. En la semana que está por concluir en reunión ordinaria de Cabildo ¡Palos! que la alcaldesa es puesta en aprietos por un regidor del PVEM con una pregunta que no pudo contestar. Ahí estaba Pedro Osuna y fue quien salió al quite. Todo mundo se pregunta –excepto los “maiceados” regidores muleginos– ¿Y que hacía Pedro Osuna en una reunión de Cabildo respondiendo preguntas de los regidores?. Se supone que para poder participar en una reunión de esta naturaleza tiene que tener la autorización expresa del Cabildo; ser invitado por el alcalde, síndico y los regidores; acordar los temas y la agenda a tratar en el pleno y al exponer específicamente algún planteamiento, sugerencia o propuesta ante el cuerpo edilicio contar con la previa autorización de los ediles?. El hecho de ser el esposo de la alcaldesa no significa hacer lo que le pega su regalada gana. Su papel ante el Cabildo y ante el gabinete municipal es la de un ciudadano común y corriente, no el de andarse atravesando. ¿O no?.

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SOBRE EL CABRESTO

Este sábado, a las nueve de la mañana, Anayeli Larios, viuda del profesor Félix Mario Higuera Arce, familiares, conocidos y amigos del desaparecido mentor, entre ellos el grupo Reflexión en pleno y los que formamos parte del grupo Caleta, haremos acto de presencia en San Pedro, donde la señora Anayeli Larios colocará una placa alusiva con el nombre del recordado maestro a la entrada de su casa en San Pedro, en el primer aniversario de su fallecimiento. Por ahí estaremos, Díos mediante…..Salud.