7 PilaresEn Opinion de...

7 Pilares / De vuelos, caderas y turismo

¡Shakira está en Los Cabos, palomilla! —grita eufórico El Bolas en llegando a Los 7 Pilares, antro semiclandestino de gran raigambre y tradición en la islota ubicada a la diestra de… ya saben.

–¿Y? –responde El Parara con cierto desgano, como dándole a entender al orgullo de su universidá que la visita de la señora esa le viene valiendo escasa atención.

— Pues que resulta que si en el primer vuelo directo de España nos llegó la Shakira con sus críos, y retozaron en la arena y se rieron y probaron las delicias de esta isla y, lo mejor, no trajo a su galán El Piqué, eso está mejor.

–¿Y? –insiste el guardián de la tradición insular— ¿a nosotros qué?

Como el diálogo va tomando tintes de discusión algo chirrisca, ha de ser El Juntabotes, (self made man que cotiza en la neoyorquina Bolsa de Valores) quien intervenga para aplacar posibles desavenencias entre dos de los más reputados clientes del aguaje:

         –El Bolitas/

         –¡Bolas, amigo Juntabotes, Bolas, que aquí sí que el tamaño importa!

         –Lo que El Bolas quiere decir, maese Parara, es que si la colombiana nos llegó en el primer vuelo Madrid-Los Cabos, es que el turismo europeo va a empezar a desgranarse por estos rumbos, y eso significa que los miles de millones de dólares que ya estamos ganando con esa actividad, van a ser más con los compas que nos lleguen vía Madrid, de Alemania, Francia, Italia, los países nórdicos (que se joden de frío) y etcétera.

–¿Y? –repite El Parara– ¿las divisas van a caernos a nosotros también? ¿No se las van a llevar las grandes cadenas de hoteles y restaurantes, la Maña, o sea: los abusivos de siempre?

         –Algo ha de tocarle al infelizaje, pues. Los que trabajan en los hoteles, los que transportan a los turistas, los que les sirven bebidas y les rentan lanchas, los conseguidores, los puchadores, los jatdogueros, taqueros y demás… La derrama fluye hasta las capas bajas, Parara, –justifica el Zar del Aluminio Recuperado. El turismo es la principal fuente de dinero en esta isla. Por eso hay que aplaudir la llegada de Shakira y sus críos, que viene siendo un símbolo; no más, no menos.

         –Me recuerda –dice El Parara— a los inicios del turismo en La Habana, Las Vegas, Miami, y ahora Cancún… ¿No estaremos lanzando vítores al infierno que nos alcanza, porque es bueno para la economía? Pero, me allano: bienvenida la Shakira Isabel Mebarak Ripoll con sus caderas y sus críos juguetones… y sin el tal Piqué.